Los 92 años del “Campamento de la laguna”

[#HistoriasDiarioSur] Coyhaique desde su creación en la antigua Pampa del Corral hasta su designación como capital regional de Aysén.

Las bandas de tehuelches surcaban sus terrenos pastosos y ríos y la hicieron desde tiempos desconocidos para la historia su lugar de descanso. “Qoj”, que significa laguna, y “ajke”, que se traduce como campamento en el idioma nativo era la denominación que los tehuelches o aonikenk le daban al paraje que ahora se conoce como Coyhaique, la ciudad capital de la Región de Aysén.

A la hora de hablar de la historia de la comuna, la colonización con personas al principio no se dio en la futura capital regional, pues en 1917 se fundó el pueblo de Balmaceda con muchos chilenos que venían de más al norte del país o que pasaron la frontera con Argentina para volver a vivir en territorio chileno. 

Fue en Balmaceda y posteriormente en Valle Simpson, fundado en 1928, donde comienza a poblarse la futura comuna, ya desde principios del siglo XX. Las familias levantaron sus casas y vivieron de la crianza de ganado ovino o bovino, haciendo patria y aguantando el frío clima.

Según el libro “Aisén, panorama histórico y cultural” de Hernán Ortega y Annabella Brünning, fue en 1909 cuando empezó la ocupación masiva del Valle Simpson con la llegada de familias como la de Eduardo Foitzick, Carlos Pascual Solís, David Orellana, Arturo Vidal, Juan Aguilar, José M. Valdés, José Carrillo, Vicente Jara, Adolfo Valdebenito y muchos más.

Durante la presidencia de Carlos Ibáñez del Campo se inició un esfuerzo estatal por incrementar la presencia chilena en la zona de la Patagonia y un 30 de diciembre de 1927 se crea el Territorio de Aysén, así en 1928 se crea la ciudad de Puerto Aysén y el ya mencionado pueblo de Valle Simpson.

En aquellos años el lugar donde hoy se levanta la ciudad era conocido como la Pampa del Corral y que era una concesión de la Sociedad Industrial del Aisén y que ya en 1925 hizo limpiar el lugar para levantar unos potreros para su personal y puedan hacer grandes asados, crear una cancha de carreras a la chilena o jugar “pichangas” de fútbol. 

Fue en esa tierra aplanado por los pioneros donde un 12 de octubre de 1929 se funda el pueblo de Baquedano. Según la obra de Ortega y Brünning, el acta de fundación se firmó con la presencia del intendente de la provincia, coronel Luis Marchant González, el alcalde Ciro Arredondo Lillo, el vocal de la Honorable Junta de Vecinos Konstantino Kalstrom, el Delegado de la Municipalidad Tomás R. Anderseon y el subdelegado de la comuna teniente don Pedro Zúñiga G.

El nombre de Baquedano no prosperó y al pueblo se le siguió llamando como lo hacían los tehuelches y después los exploradores y pioneros en el idioma nativo: Coyhaique, el “campamento de la laguna”.

El agrimensor Héctor Monreal fue el que hizo las medidas para levantar una plaza y los vecinos ayudaron en dicha tarea. Nombres como los de Francisco Colomés, José Vidal Cárdenas, Teodoro Holmberg, Juan MacKay, Juan Altuna, el profesor Pedro Quintana, Eliseo Castro, Williams Saunders, Juan Oyarzún, el médico Alejandro Gutiérrez, el dentista Juan Portaleu, Alfonso Serrano, Oscar Aranda, Guillermo MacDowell, Tomás Arévalo, Salvador Hernáez, Nicolás Urcelay, José Cordero, Germán Duhalde, Ignacio Araus y muchos más ayudaron a Monreal en la tarea.

Luego, 17 meses después, un 21 de mayo de 1931 ya había 30 casas levantadas en Coyhaique y se hizo un embanderamiento de todas ellas y un acto con la presencia de la banda de Carabineros de Puerto Aysén. Según el libro de Mateo Martinic “De Trapananda al Aysén” en dos años ya había en Coyhaique con el primer almacén de propiedad de Francisco Bórquez, la primera tienda surtida de mercaderías argentinas de Ramón Cañada o el primer hotel que construyó Juan Altuna.

CRECIMIENTO ADMINISTRATIVO

Fue a mediados de la década del 1930 que se acabó la colonización de las grandes compañías arrendatarias por lo que la acción del Estado para radicar población e invertir en obras públicas fue predominante, situación que se mantiene hasta la actualidad.

El 1 de septiembre de 1937 se crea el Hospital Regional de Coyhaique.

El 8 de octubre de 1948 se realiza la elección para constituir la primera Municipalidad de Coyhaique y el voto popular designó como primer alcalde al vecino y comerciante Alberto Brautigam Lhür, mientras que los primeros regidores fueron Maximiliano Casas, Julio Chible, Juan Hermosilla, René Faraggi y el secretario fue Pedro Lizama. Todos ellos asumieron sus funciones el 30 de diciembre de 1948.

Uno de los establecimientos educacionales más antiguos es la Escuela Pedro Quintana Mansilla inaugurada en 1949.

Más adelante, el 9 de septiembre de 1959, se crea el Departamento de Coyhaique y su primer Gobernador fue Julio Chible Villarreal.

LA CAPITAL DE AYSÉN

En 1974 el gobierno militar de Augusto Pinochet inició el proceso de regionalización, transformando el Territorio de Aysén en la Región del General Carlos Ibáñez del Campo de Aysén, pero decreta a Coyhaique como capital en desmedro de Puerto Aysén, todo esto tras la publicación del Decreto Ley 575 del 13 de julio de 1974.

Desde la década de los ochenta la ciudad ha crecido en lo administrativo y se completó la construcción del tramo norte de la Carretera Austral, lo que posibilitó desarrollar actividades turísticas.

En 2015 se crea la Universidad de Aysén, primera casa de estudios superiores surgida desde la región, y que funciona desde marzo de 2017 con ocho carreras universitarias.

LA CONTAMINACIÓN

En la primera mitad de la década de 2010, Coyhaique fue una de las ciudades con más problemas de contaminación atmosférica por material particulado por consumo de leña de mala calidad y el uso de calentadores no adecuados. 

La densa y compacta nube tóxica que se produce sobre Coyhaique es un fenómeno que se ha vuelto cada vez más recurrente y el frío reinante en la zona favorece lo que se conoce como inversión térmica.

Se trata de un fenómeno donde una capa de aire caliente atrapa bajo ella al aire más frío, impidiendo su disipación, manteniendo todos los contaminantes en la zona baja. Esto genera que la calidad del aire en días de bajas temperaturas, llegue a niveles extremadamente peligrosos para la salud. En ese sentido, Coyhaique se ha convertido en una de las ciudades más contaminadas de Latinoamérica.