Patrimonio e Identidad

  • Inicio
  • Patrimonio e Identidad

Colonización de Aysén: los pioneros de una región (Parte I)

Por Pablo Santiesteban / 6 de diciembre de 2020
Colonos alemanes realizando quemas de bosques en Puyuhuapi en la década de los 30. Recién en el siglo XX comenzó la colonización en serio.
[#HistoriasDiarioSur] Mujeres y hombres de la isla de Chiloé, chilenos argentinizados y europeos empezaron a hacerse una vida en parajes de soledad.
Atención: esta noticia fue publicada hace más de 3 años

Aysén sigue siendo una región donde la naturaleza sigue teniendo la última palabra. Paisajes de ensueño, bosques casi inexplorados, ríos y lagos maravillosos, fiordos tan espectaculares como los de Escandinavia, vientos helados y cielos nublados hacen que la Región de Aysén provoque curiosidad y ganas de visitarla.

“El que se apura en la Patagonia pierde el tiempo” se dice en Aysén y tal frase cobra sentido al estudiar su historia. En Aysén costó el proceso de poblar sus terrenos, de hecho, ni siquiera los conquistadores españoles se interesaron en fundar ciudades por lo que los indios aonikenk (tehuelches), chonos y kaweskar siguieron viviendo sus vidas casi sin alteraciones hasta bien entrado el siglo XIX. La colonización se tomó su tiempo a diferencia del resto de Chile.

Existieron dos vías de colonización en la región, la espontánea y la empresarial. Según el libro de Mateo Martinic “De la Trapananda al Aysén”, tras el éxito que estaba teniendo el proceso de colonización alemana en Valdivia, Osorno y Llanquihue, el Estado de Chile entregó concesiones de terreno a distintas personas con la condición de que introdujeran colonos extranjeros y que abrieran canales de navegación y comunicación. Pronto se formaron sociedades con el fin de obtener el capital suficiente para explotar económicamente sus terrenos, lo que sólo sería posible incluyendo a terceros. Luego arrendaban sus tierras a estas mismas sociedades. Ejemplo de esto son la Compañía Explotadora del Baker o la Sociedad Industrial del Áysen. 

LOS GAUCHOS CHILENOS

El libro de Martinic afirma que la Compañía Explotadora del Baker realizó un gran esfuerzo colonizador, al mismo tiempo que mejoró y construyó caminos. Muchos chilotes se unieron a la iniciativa de esta compañía y se quedaron en la región contribuyendo a su poblamiento, pero a principios del siglo XIX las múltiples dificultades aumentaron las deudas y la Compañía quebró. Muchos colonos chilenos dejaron sus tierras en Aysén y debieron irse a Argentina. 

Los chilenos que vivían en Argentina pronto prosperaron, sin embargo el gobierno de ese país inició una política de hostigamiento, debido a que su número aumentó en la frontera. Algunos optaron por volver a Chile cuando se puso en vigencia una ley que los invitaba a radicarse como colonos en sus antiguas tierras o en otros lugares del país, como Aysén. 

Entre la primera y la cuarta década del siglo XX, millares de hombres se instalaron en lugares como Futaleufú, Valle Simpson, Valle Jeinimeni y la costa sur del lago Buenos Aires, entre otros. Era típico ver a verdaderos gauchos montados a caballo levantando sus estancias y hablando con un sonsonete argentinado, pese a que ellos mismos decían que eran chilenos. Así llegaron los gauchos chilenos. Usaban bombachas, botas, cinturón ancho de cuero, manta de lana y sombrero de fieltro o una boina vasca. Siempre llevaban atrás un cuchillo o un revólver porque la ley del más fuerte imperaba en una localidad tan alejada de la autoridad y la justicia.

En esa época también llegaron muchos chilotes y habitantes de las islas a trabajar a las estancias ganaderas de Tierra del Fuego, y desde ahí comenzaron a avanzar hacia el norte. Además empezaron a llegar colonos españoles, árabes y belgas, entre otros.

ALREDEDOR DE LA ESTUFA

Junto con la llegada de los colonos también vino el declive de los pueblos indígenas, algunos asesinados con total descaro por chilenos o europeos o diezmados por las enfermedades de las que chonos, kaweskar y aonikenk no tenían anticuerpos. Fue el episodio más vergonzoso de la colonización de Aysén.

Pese al auge colonizador, terminado el primer tercio del siglo XX, menos del 10% del territorio de Aysén estaba ocupado. La zona era muy grande -casi un país completo- y existían grandes distancias entre las zonas pobladas. Algunos colonos realizaron quemas masivas de bosques milenarios para aprovechar la tierra para el cultivo, una acción que impactó el paisaje nativo, pese a que no todos los colonos estaban de acuerdo con tales acciones como el alemán Felipe Westhoff, que se instaló en Melinka, y que criticaba este método.

Todos estos pioneros eran artesanos y hacían del hacha, en el caso de los hombres, y las agujas, en el de las mujeres, sus principales herramientas para subsistir.

En aquellos románticos años de inicios del siglo XX, los colonos levantaron sus casas con madera que sacaban de los montes, con arcilla o ramas. La cocina y el comedor era una sola pieza donde la estufa era esencial para la vida diaria. La comida era sencilla, principalmente cordero y papas, y la gente se reunía a contar historias, tocar guitarra y cantar.

Así se inició el proceso de colonización de Aysén, primero con las exploraciones marítimas en los lugares costeros y después adentrándose a la pampa a lomo de caballo y con la escopeta pegada a la montura y un cuchillo en el cinturón. Años de sacrificio, a veces de violencia, pero también de compañerismo, solidaridad y mucha soledad, demasiada soledad. 

VER PARTE II:

https://www.diarioregionalaysen.cl/noticia/patrimonio-e-identidad/2020/12/colonizacion-de-aysen-los-pioneros-de-una-region-parte-ii

VER PARTE III:

https://www.diarioregionalaysen.cl/noticia/patrimonio-e-identidad/2020/12/colonizacion-de-aysen-pioneros-de-una-region-parte-iii

Si vas a utilizar contenido de nuestro diario (textos o simplemente datos) en algún medio de comunicación, blog o Redes Sociales, indica la fuente, de lo contrario estarás incurriendo en un delito sancionado la Ley Nº 17.336, sobre Propiedad Intelectual. Lo anterior no rige para las fotografías y videos, pues queda totalmente PROHIBIDA su reproducción para fines informativos.
¿Encontraste un error en la noticia?