Conaf de Aysén conmemora el Día Mundial de la Naturaleza

Se reitera el llamado a cuidar las áreas protegidas de nuestra región.

El 3 de marzo de 1973, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES).

La instancia regula la exportación, reexportación e importación de especies vegetales y animales nativas o propias de un sector. 

En consideración a ello, desde hace poco más de 50 años podemos se conmemora el Día Mundial de la Naturaleza.

Para los habitantes de Aysén, este día cobra un sentido especial porque el 51% del territorio (casi 5.5 millones de hectáreas) y el 42% de nuestro maritorio (concepto de área geográfica que conjuga: la comunicabilidad, la riqueza, la adversidad y las energías.)  (1.9 millones de hectáreas) lo constituyen Áreas Protegidas.

Entre estas zonas se encuentran los Parques Nacionales (PN) Laguna San Rafael, Isla Magdalena, Queulat, Isla Guamblin, Corcovado, Bernardo O’Higgins, Cerro Castillo, Melimoyu y Patagonia; las Reservas Nacionales (RN) Río Simpson, Lago Carlota, Coyhaique, Lago Las Torres, Katalalixar, Lago Rosselot, Las Guaitecas y Trapananda; y los Monumentos Naturales (MN); Dos Lagunas y Cinco Hermanas.

Proceso de cambio climático

Al respecto, el director Regional (I) de Conaf, Ronald Valenzuela explica relevancia de este día no sólo por lo que significa la conservación del medio ambiente, “sino que también por la relación entre el ser humano y su entorno, considerando que estamos viviendo un proceso de cambio climático”, dice.

“En el caso de la Región de Aysén, tenemos más de 4 millones de hectáreas de bosque nativo que cuidar y proteger pensando en las generaciones futuras. Por lo mismo, la conservación y la valoración de la naturaleza debe ser algo que nos involucre a todos y a todas; y en tal sentido, todos podemos realizar diariamente pequeñas acciones, actos cotidianos, que tienen buenos resultados, como por ejemplo reducir, reciclar y reutilizar”, agrega.

Para la Jefa (I) del Departamento de Áreas Silvestre Protegidas (DASP) de Conaf Aysén, Andrea Bahamonde, “cada una de estas Áreas Protegidas por el Estado se destaca por resguardar diversos ecosistemas que son moldeados por elementos físicos (abióticos) como el clima, suelo y el relieve, entre otros, además de elementos bióticos (seres vivos)”. 

“Todo ello determina la presencia de una gran variedad de especies silvestres, tanto animales como vegetales, que son protegidos por nuestras y nuestros guardaparques, quienes se han transformado en verdaderos guardianes la naturaleza regional”, aseveró.

Las autoridades invitaron a la comunidad, y también a quienes visitan la región, a cuidar y valorar estos espacios naturales de conservación de la naturaleza, ya que poseen un valor intrínseco, pero además contribuyen en aspectos ecológicos, genéticos, científicos, culturales, educativos,  sociales, económicos, recreativos en desarrollo sostenible y del bienestar de los seres humanos.