AG Río Baker preocupada por crisis del mercado de la lana

Hay 180 mil kilos guardados en un galpón que no se han podido comercializar en Cochrane.

La producción ovina fue una de las principales medios productivos de la Región de Aysén en los años de los pioneros, pero paradójicamente en los tiempos actuales está en crisis. La Asociación Gremial de Pequeños Agricultores y Ganaderos de Río Baker planteó su preocupación por el alicaído mercado de la lana y aseguran que tienen más de 180 mil toneladas de este producto que no han podido ser comercializadas.

Miembros de la asociación plantearon la situación al diputado Miguel Ángel Calisto y al consejero regional Felipe Klein, quienes les plantearon su preocupación por la crisis en parte por las importaciones.

Según el diputado la preocupación no es sólo de la AG Río Baker, sino de todos los campesinos de la región. 

"¿Qué hacemos con la lana? Durante mucho tiempo este producto fue el principal sustento económico del campesinado, exportándolo incluso. Ahora lo tienen guardado en galpones porque no hay forma de poder comercializarla”.

“Esto genera un problema, incluso los campesinos están quemando la lana o la entierran, porque no saben qué hacer con ella. Con esto también se pierden tradiciones, lo que es lamentable. Creo que esto es bueno poder traspasárselo a las nuevas generaciones, que no se pierda la tradicional producción de la lana”, indicó.

Ester Hernández, secretaria de la AG Río Baker, indicó que la lana que producen lleva tres años guardada en un galpón.

“Necesitamos encontrar el negocio para este producto, sabemos que hay vías por donde se puede hacer. A mi personalmente, estamos con esta gran preocupación. Gracias a autoridades como el diputado, podemos visibilizar y gestionar para encontrar el negocio”, dijo Ester Hernández. 

Una propuesta

El legislador agregó que una de las ideas que se han barajado es que el Ministerio de Vivienda pueda incentivar el uso de lana local para el aislamiento térmico de las casas que construyen. Esto ya se aplica en otras actividades, como sucede con Junaeb, que exigen a las empresas de alimentación al menos un 5% de compras locales.

“Esta es una manera ecológica de incentivar la comercialización y el uso de un producto regional en algo tan necesario como es la construcción de viviendas. Esta es mucho más barata que la lana de vidrio", comentó Calisto.  

El parlamentario dijo que los productores laneros están viendo la posibilidad de buscar socios internacionales y que necesitan el apoyo del Gobierno Regional, como también del Ministerio de Agricultura para generar vínculos de comercialización de la lana.

El consejero regional Felipe Klein aseguró que este es un tema que lleva un par de años, donde no hay mercado para poder vender la cantidad. 

“Hace un año nos juntamos con el Seremi de Agricultura y representantes laneros de Coyhaique para ver opciones, pero hasta el día de hoy no tenemos respuesta. Hacemos un llamado al Gobierno que se preocupe de Cochrane y de los laneros para buscarles un mercado, ya hay 160 mil kilos que no tienen mercado de venta”, indicó Klein.