Más de 23 horas de angustia, abandono y rabia vivieron cerca de 150 turistas que contrataron un catamarán para visitar la Laguna San Rafael, pero que en plena navegación encallaron con un banco de arena. La situación se hizo difícil a bordo, pues en la larga espera hubo personas mayores que tuvieron alza de presión y no había un botiquín disponible y también había bebés con alergias alimentarias que necesitaban ayuda.
La larga espera hizo que varios turistas se ofuscaran, tal como lo relató Deyanira Reglas, proveniente de Santiago. Ella había contratado una excusión en el Hotel Loberías del Sur junto a su madre y dos tíos, pero el panorama agradable que era visitar la laguna San Rafael se hizo un total desagrado.
Esta turista relató a Diario Regional Aysén que el catamarán al que se subió con su familia encalló con un banco de arena. Añade que en dicho momento ella se encontraba en el baño y que el golpe fue violento e hizo moverse al catamarán muy fuerte.
“Faltaba una hora y media para llegar a la laguna y el ventisquero y el barco sufre un movimiento fuerte, se quebraron muchas cristalerías. Yo estaba en el baño y casi me caigo. Nadie sabía lo que pasaba, ni siquiera los guías. Nos dijeron que habíamos encallado con un banco de arena, aunque también está la duda de si fue una falla de motor”, fue lo primero que comentó Deyanira Reglas.
El hecho habría ocurrido cerca de las 2 PM.
LA LARGA ESPERA
La turista expresó que alguien de la tripulación les informó que el catamarán iba a esperar dos horas hasta que subiera la marea. Al parecer la tripulación no informaba aún de lo ocurrido a la Gobernación Marítima de Puerto Chacabuco. Pasaron las dos horas y el catamarán siguió encallado y, en ese momento, Deyanira Reglas expresó que les avisaron que iban a llamar a la Armada para que escoltaran la nave a puerto Chacabuco.
La turista santiaguina dijo que desconoce los daños que tuvo el catamarán, pero que sí supo que llegó la LSG Aysén de la Gobernación Marítima y los escoltó al puerto. “Yo sabía que el catamarán navegaba a 50 nudos, pero cuando nos escoltaron iba a 15 nudos, por eso llegamos como a las 4 de la mañana. Estábamos muertos de cansados y con frío”, expresó.
Deyanira Reglas dijo que su madre sufre de presión alta y con la situación tuvo un alza. Como no había botiquín en el catamarán tuvo la suerte de conseguir medicamentos entre los propios pasajeros para ayudar a su madre. Añadió “en ningún momento el capitán del barco nos dio la cara” y que “casi se armó un motín aquí dentro, estuvo peludo el tema”.
La turista expresó que tras descansar muchos pasajeros se están poniendo de acuerdo para hacer una denuncia formal a la empresa. Explicó que el Hotel Loberías del Sur los atendió bien y les dijo que en 20 años jamás les había ocurrido un problema como este y que les ofrecían hacer otra excursión gratis a futuro.
En el caso personal de Deyanira Reglas hoy perdió su excursión pagada a Catedrales de Mármol y el vuelo de regreso que tenía para el jueves a Santiago. Actualmente su familia está en Puerto Chacabuco evaluando viajar a Coyhaique.
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