Las dificultades de hacer rendir el nuevo sueldo mínimo en la Región de Aysén

"Quizás un elemento que uno podría considerar en la discusión del ingreso mínimo es tener uno específico por región, que refleje el costo de vida", señala Roberto Pasten, investigador de la Facultad de Economía y Gobierno de la USS.

Desde este viernes 1 de septiembre, el sueldo mínimo se incrementará en $20.000, alcanzando los $460.000. La medida en curso es parte de un proceso gradual que busca elevar el ingreso mínimo mensual hasta llegar a los $500.000 en julio de 2024.

En lo que respecta a la trayectoria de esta estrategia de aumento del salario mínimo a 500 mil pesos ya se realizó un aumento a 440 mil pesos en mayo de este año, a $460.000 a partir del 1 de septiembre, y finalmente a 500 mil en julio de 2024. 

Adicionalmente, en caso de que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) del 2023 supere el 6%, se llevará a cabo un aumento anticipado de $10.000 a partir del 1 de enero de 2024. 

Esto situaría el sueldo mínimo en $470.000 en esa fecha, para luego continuar con el aumento gradual previamente establecido.

Costo de vida

Si bien pocos cuestionan el progresivo aumento del sueldo mínimo como una ayuda al bolsillo de todos los chilenos, otros cuestionan el beneficio real que pueda representar en una ciudades como Puerto Aysén y Coyhaique, donde los costos en arriendos o calefacción son considerablemente más altos que en otras zonas del país. 

“Si uno considera que la región tiene un ingreso medio nominal y real por debajo del ingreso nacional, un aumento uniforme en todo el país va a terminar favoreciendo más a otro sectores, no necesariamente a la zona”, advirtió Roberto Pastén, investigador de la Facultad de Economía y Gobierno de la Universidad San Sebastián.

“Quizás un elemento que uno podría considerar en la discusión del ingreso mínimo es lo que se hace en algunos países, que es tener un ingreso mínimo específico por región, que refleje el costo de vida de cada una”, propone el investigador de la USS. 

Traspaso de costos a empresas

Pastén agregó además que el aumento del sueldo mínimo no es algo que se pueda fijar sin cargar los costos a otros actores de la economía. 

“El impacto siempre existe porque quienes siempre terminan financiando estos aumentos son las empresas. Muchas veces las pequeñas y medianas empresas no tienen la capacidad de soportar estos reajustes y, en otros casos, las grandes empresas lo pueden traspasan a los precios. Entonces siempre hay un tercero que va a ser involucrado en esto”, indicó el experto.  

Al respecto, el Seremi de Gobierno en Los Ríos, Juan Sebastián Guerra, destacó que por primera vez en los 46 aumentos del sueldo mínimo que ha habido desde el retorno a la democracia, se consideró a las Pymes. 

Esto porque en esta ocasión se incluye un subsidio para las Mipymes, al que las empresas de menor tamaño pueden postular a través de la web del Servicio de Impuestos Interno (www.sii.cl).