Bomberos insisten en limpieza de cañones para evitar incendios

Conoce qué hacer para evitar inflamación de cañones de chimenea en este invierno.

El Cuerpo de Bomberos de Coyhaique, ante el frente de bajas temperaturas y condiciones climáticas invernales, hace un llamado a extremar las precauciones de limpieza de ductos y evitar recarga de estufas.

Son varias las emergencias a las que han acudido bomberos en la época de otoño y ahora, con la entrada del invierno, se mantienen las emergencias y llamados por inflamaciones de ducto.

La combustión de leña produce ácido acético y piroleñoso, los que combinados con la humedad expelida forman creosota, la que se deposita en los conductos de la cámara de combustión y en las paredes interiores de los cañones, obstruyendo e impidiendo el correcto funcionamiento de la estufa a leña.

En esas condiciones, el proceso de encendido de la estufa puede ser lento y difícil de lograr. En determinadas condiciones los ductos se inflaman, iniciándose un fuego en el extremo inferior y aumentando progresivamente al subir. 

La temperatura del cañón alcanzará niveles extremadamente altos, incluso hasta los 1.000 grados celsius y se pondrá incandescente mientras se quema el material combustible existente en sus paredes interiores.

El Cuerpo de Bomberos de Coyhaique pide hacer una limpieza periódica de los ductos para minimizar los riesgos, considerando que frente a una emergencia que puede ser evitada, no se alcance a concurrir a tiempo por diversas razones, por lo que se apela a la prevención y responsabilidad de cada uno de nosotros.

¿Qué hacer ante una inflamación?

Si su cañón de estufa se inflama lo primero es mantener la calma porque una instalación bien hecha y con los materiales adecuados debe resistir perfectamente esta situación.

Enseguida hay que cerrar bien la puerta del calefactor y cerrar el control de aire primario. Posiblemente, dentro de unos cinco minutos se terminará el fuego al interior del cañón.

No abra la puerta de la caja de fuego ni la del cenicero hasta treinta minutos después de terminado el fuego. De lo contrario, la inflamación podría comenzar nuevamente.

Vigile atentamente el cañón, especialmente en la zona del entretecho y alejar todo material combustible de las cercanías del cañón.

Si la situación se prolonga demasiado o si sospecha que su instalación no fue bien hecha, llame inmediatamente a Bomberos.

Poner paños (toallas gruesas) húmedos alrededor del tubo para disminuir la temperatura y con precaución por peligro a las quemaduras.

Bomberos al llegar utilizará las técnicas necesarias y propias, para controlar la inflamación según las características de esta.

No utilice su calefactor nuevamente hasta que sea revisado por un técnico calificado.