Varios comentarios causó el registro de un video donde se aprecia a un jabalí en las cercanías de Valle Simpson y Villa Frei.
Se trató de un avistamiento inusual y que, según el encargado regional de Recursos Naturales del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), Guillermo Díaz, puede que sea cada vez más frecuente en la región.
Díaz señala a Diario Regional Aysén que el jabalí es una especie introducida al país por lo menos hace 90 años, que se reproduce muy rápidamente y que es considerada dañina por la vigente ley de caza.
Añade que hay que tener mucho cuidado en caso de toparse con uno de ellos, pues el jabalí es muy agresivo y sus colmillos son capaces de producir serias heridas.
“El jabalí es un animal muy agresivo. Son muy territoriales y siempre el consejo es no acercarse ni enfrentarlos y trata de subirse a un lugar alto porque ellos embisten. Los que cazan con perros, que está prohibido, los jabalíes rajan a los animales con sus colmillos”, indica Guillermo Díaz.
El experto dijo que los encuentros humano-jabalí serán frecuentes a medida que aumentan las parcelaciones en Aysén y se vaya poblando zonas rurales precordilleranas.
Díaz añadió que la mayoría de los jabalíes ya no son puros porque se han ido mezclando con cerdos; de hecho, el animal que se ve en el video es un híbrido aunque conserva el mechón de pelo en la cabeza y lomo característico de la especie.
“Hay personas que los han cruzado o simplemente los han hecho de manera espontánea. El jabalí, pese a que tiene cromosomas distintos, se puede reproducir con un cerdo doméstico y al mezclarse genera camadas más grandes porque una jabalí puede generar cinco crías, pero con un cerdo doméstico produce hasta diez y aumenta la dispersión”, comenta el experto del SAG.
Díaz indica que el jabalí puro posee una especie de “peineta” en el lomo, sus orejas son paradas, las pezuñas son negras y la cola es recta.
Lo preocupante de la proliferación de estos animales es que son omnívoros, comen de todo, y afectan las siembras, comen huevos de ave y hasta atacan a las aves. “En el caso de la fauna natural pueden consumir ranitas, insectos roedores, plantas y hongos, son súper destructivos”, enfatiza.
Aconsejo que si un vecino ve a un jabalí de inmediato debe contactar al SAG llamando al teléfono 67 2325311.
El SAG permite la caza del jabalí sin restricciones, el problema es que cazar a un ejemplar no es tan sencillo, dado que son inteligentes y pueden tener la capacidad de detectar el peligro con su poderoso olfato.
“Los machos juveniles andan solos y son difíciles de cazar. Yo he sabido que al poner trampas, el macho por lo general no cae, manda a un macho beta a observar y sólo cuando están seguros el alfa va a consumir”, explica Guillermo Díaz.
Añadió que los cazadores de jabalíes deben poseer una cierta experiencia, en especial para seguir rastros. Díaz recomienda no llevar perros porque no van a atacar al animal y tal vez sólo los acorrale.
Consultado acerca de si el SAG posee un mapa aproximado de presencia de jabalíes en Aysén, Guillermo Díaz dijo que “hay un mapa aproximado”. “Tenemos información de que hay presencia especialmente en Mallín Grande”, indicó.
En conclusión, un jabalí es hueso duro de roer al momento de cazarlo, aunque su carne, en especial del jabalí puro, es considerada de primera calidad y, al menos en Argentina, es uno de los platos exclusivos que se busca en las típicas parrilladas.
Grupo DiarioSur, una plafaforma informativa de Global Channel SPA, Av. España, Pasaje Sevilla, Lote Nº 13 - Las Animas - Valdivia - Chile. Powered by Global Channel